CLÁSICA Xabier Armendáriz
«Dos caras del siglo XX»
Viernes, 17 de Febrero de 2023. Teatro del Museo de la Universidad de Navarra. Sofya Melikyian, piano. Orquesta Sinfónica de Navarra. Dmitri Loos, director. Arvo Pärt: Trisagion para orquesta de cuerdas, (1994). Alexander Tsafman: Suite de jazz, (versión para piano y orquesta de Anton Strelnikov). Alfred Schnittke: Concierto para piano y orquesta de cuerdas, (1979). Concierto inscrito en el Ciclo Cartografías de la Música organizado por el Museo de la Universidad de Navarra.
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El Ciclo Cartografías de la Música, que cada año ofrece el Museo de la Universidad de Navarra, se ha abierto con un concierto inspirado en los sucesos que se viven en el Este de Europa durante este último año. Reconocía el propio director de la sesión, Dmitri Loos, que la composición de este programa fue concebida a raíz de la invasión de Ucrania por parte de Rusia, agrupando en una misma sesión obras de tres autores provenientes de distintas repúblicas soviéticas. Sin embargo, también se puede considerar que este concierto es un choque de estilos, incluso de maneras de acercarse a la música y a un siglo tan particular como el XX, donde se produjeron catástrofes horrorosas pero también hubo períodos de liberación y transgresión.
La sesión se iniciaba con Trisagion de Arvo Pärt, una obra en la que el compositor estonio reflexiona a partir del texto y la acentuación de las palabras de la oración con la que se inicia la Divina Liturgia de la Iglesia ortodoxa, su celebración equivalente a la Misa latina. Hablamos de una obra formada a partir de pasajes que se repiten a modo de centones pero que, por su carácter fragmentario y contrastante, adquiere una profunda tensión. La Orquesta Sinfónica de Navarra ofreció su mejor nivel y Dmitri Loos la condujo con gran atención a los detalles y demostrando todo el poso sinfónico que la obra reclama.
Continuaba la sesión con la Suite de jazz de Alexander Tsafman, que recuerda por su ambiente a las partituras equivalentes de Dimitri Shostakovitch. Y es que ambos autores, criados en la Unión Soviética, difícilmente podían acceder en los años 1930 a grabaciones del jazz que se practicaba en los Estados Unidos, así que nos ofrecen una visión del jazz filtrada por la música de cabaret berlinesa de los años 1920, con su ambiente a veces gamberro, a veces melancólico e incluso algo sentimental. No tuvo ningún remilgo Dmitri Loos en recrearse en este ambiente decadente, de manera que todas las secciones adquirieron su viveza y su carácter danzable. Sofya Melnikyan supo integrarse adecuadamente en la textura orquestal y ofreció una obra de una autora armenia antes de afrontar su intervención más destacada.
Y es que el programa oficial se cerraba con el Concierto para piano y orquesta de cuerdas de Alfred Schnittke, obra de gran sobriedad en su comienzo que luego va creciendo en oleadas cada vez más dramáticas en el seno de un movimiento que no conoce interrupciones ni caídas de tensión. Sofya Melnikyan demostró aquí su gran capacidad, ofreciendo una demostración de un pianismo poderoso y encrespado pero capaz de arranques de lirismo hiriente, muy apropiado todo ello para los conciertos de Rachmaninov, Prokofiev…, y por supuesto también para la obra que comentamos. El acuerdo y la unanimidad de criterio con Dmitri Loos fueron absolutos, y las cuerdas de la Orquesta Sinfónica de Navarra rindieron a su mejor nivel. Eso sí, después de un final como el de este concierto, resultó algo curioso que sonara como propina un tango de Astor Piazzolla… Debe de ser la aplicación actual de la práctica de Sir Thomas Beecham: incluir siempre propinas en los conciertos, de signo contrario a la obra con que terminara el programa oficial.
En conjunto, fue un excelente arranque del ciclo Cartografías de la Música, una serie que nos va a ofrecer varios eventos de gran interés. Seguiremos informando.