“Gershwin va a Hollywood”
Llegado el domingo previo a Navidad, la Banda de Música La Pamplonesa ha puesto fin a sus conciertos del año 2019. Ha sido sin duda un año especialmente intenso y marcado por las actividades conmemorativas del centenario de la agrupación, tal como pudo percibirse en los meses de mayo y junio, en los que se centraron buena parte de los eventos.
El Concierto de Navidad de La Pamplonesa ha sido siempre una de las actuaciones más esperadas por los aficionados, y este año no ha sido una excepción. Con entradas a precios muy populares, el nombre de Raquel Andueza ha conseguido que las localidades se agotaran todavía con más rapidez de lo habitual, que ya es decir.
Ofrecer un concierto de estas características con Raquel Andueza suponía para La Pamplonesa un interesante desafío. La soprano navarra ha centrado su actividad en el ámbito de la música antigua, donde una voz como la suya ofrece mayores posibilidades. El repertorio antiguo no está al alcance de La Pamplonesa, pero Andueza propuso un punto de encuentro buceando en las melodías de Georges Gershwin y los arreglos en forma de swing de villancicos tradicionales, un repertorio que la cantante no había explorado hasta ahora.
En la reciente entrevista que Raquel Andueza ofrecía a Diario de Navarra, Santi Echeverría le preguntaba a la soprano por sus modelos al acercarse a las canciones de Georges Gershwin. Muy sabiamente, Andueza respondió que, en lugar de imitar modelos concretos, ella debía buscar su camino de acuerdo con las capacidades de su voz.
Descartados los acercamientos de las grandes cantantes de jazz del pasado y las versiones de tipo operístico, el acercamiento de Raquel Andueza a este repertorio recordó más bien a las grandes actrices de los años 1940 y 1950 que, teniendo voces más limitadas, conseguían transmitir los mensajes de las canciones con gran eficacia.
Estas características quedaron ya claras en las canciones de Gershwin que llenaron la primera parte del concierto. Fue especialmente notable la versión de Summertime, muy recogida e íntima, muy lejos del glamour que le aportan a esta canción muchas voces clásicas y que, en realidad, no siempre favorece a esta música. Pero este mismo enfoque también fue muy adecuado para los villancicos que poblaron la segunda parte, que se escucharon en nuevas transcripciones en forma de swing, muy estilo años treinta.
Fue particularmente ingeniosa la versión de Olentzero, con participación de los propios músicos de La Pamplonesa también como cantantes en momentos concretos. En fin, Raquel Andueza demostró su inteligencia musical para adaptar el repertorio concreto del concierto a sus propias capacidades, consiguiendo un éxito de público completamente merecido.
La Banda de Música La Pamplonesa acompañó con gran diligencia a Raquel Andueza, que asumió buena parte del concierto, guardándose apenas un par de momentos de respiro. Dentro de las intervenciones en solitario de la banda, destacó un nuevo arreglo sobre materiales de El Cascanueces de Tchaikovsky, también en forma de swing, que incluía muchas de las danzas más recordadas por formar parte de la suite.
Al final de la sesión, Vicent Egea ofreció un discurso de felicitación navideña y de Año Nuevo más amplio de lo habitual, que aprovechó para agradecer el apoyo del público y la labor de los músicos y muchas otras personas fundamentales en el trabajo de la banda de cuya presencia el público apenas es normalmente consciente. Nosotros nos unimos a esos saludos y aprovechamos para desear a todos los lectores de Diario de Navarra una feliz Navidad y un año 2020 en el que la mejor música nos siga acompañando con regularidad.