Ésta ha sido la última interpretación que se ha escuchado en los Proms del Requiem de Verdi. Es una buena versión, con dirección muy operística de Semyon Bychkov y un cuarteto de solistas, en donde destaca la presencia del tenor altés Joseph Calleja, que recientemente realizó en Pamplona un recital solista. Aquí está algo más expresivo que entonces, y más centrado en estilo. La orquesta y los coros son magníficos.